DONAR ES VIDA

Por: Einar Edgar Roca Roledo

Por las redes sociales están circulando varios anuncios de personas que solicitan la donación de plasma hiperinmune para pacientes que padecen COVID-19. Lastimosamente, son pocas las personas que responden a estos anuncios y las solicitudes incrementan a diario. La desesperación por conseguir donantes ha provocado que muchos pretendan sacar provecho de esta situación, al punto de pedir dinero a cambio de la donación.  Pese a que existe una normativa vigente que prohíbe la remuneración o comercialización de sangre humana, no se ha podido frenar este tipo de actos.

El plasma es la principal arma que tenemos para afrontar al coronavirus. Las inmunoglobulinas, localizadas en esta porción de la sangre, son los elementos clave para derrotar al coronavirus. Cuando una persona ha superado esta enfermedad se crea una memoria inmunológica que permite almacenar información sobre dicho patógeno. Al hacer la transfusión se acelera el proceso de generar anticuerpos y esto posibilita que se pueda neutralizar al virus.

Actualmente, hay más de dos mil recuperados en el país, los que tranquilamente podrían donar su plasma, pero ni el 10% ha acudido a realizar la donación. Ante la falta de respuesta, varias empresas públicas y privadas están tratando de incentivar a la población para que acuda a los bancos de sangre para poder ser voluntario. Esta es una buena manera de animar a las personas, pero no se debería proceder así, ya que este acto tiene que ser altruista y sin la pretensión de obtener algo a cambio.

Existe un refrán que dice: “hoy por ti, mañana por mí”. En algún momento la vida recompensa todos los actos buenos y aunque no nos recompensara hay que tratar de colaborar al prójimo. Esperemos que la gente que pudo superar el coronavirus pueda tomar conciencia y se decida por donar de manera voluntaria. Ellos pueden ser la luz de esperanza de muchas familias que en este momento viven en la oscuridad.